lunes, 26 de enero de 2009

RECONOCIMIENTO A LA UMD



En la foto superior, el Tte. Cnel. Rafael Tejero nos muestra el
galardón. La foto inferior corresponde al acto en el Auditorio
Marcelino Camacho, en la sede de CC.OO


Allá por los años setenta, paseando por el portal del Ángel de Barcelona, vi una pintada en el suelo que decía: “Llibertat Julve i Busquets”. Esta era una pintada poco usual, que se diferenciaba de las habituales en aquellos tiempos en los que había que pintar y sembrar octavillas para reivindicar derechos, libertades, liberaciones y denunciar la pena de muerte. Aquella pintada no la firmaba nadie, ninguna organización política ni sindical, quizá fue eso lo que me llevó a preguntar e indagar quienes eran estos señores y qué habían tramado que tanto disgustaba al régimen.

Estos señores resultaron ser unos militares que intentaban luchar contra el régimen dictatorial de Franco desde el interior de las Fuerzas Armadas. Esto no era habitual en aquel entonces, y todos, mirábamos a los militares con una gran dosis de desconfianza y desprecio, no en vano, eran los garantes de la continuidad del régimen nacido el 18 de julio de 1936 y tenía un componente de ideologización e identificación de aquel régimen más que notable.

Estos militares no eran más que la punta de un iceberg que aunque pequeño, representaba cualitativamente un cambio importante a la vez que singular que abría una brecha en el monolitísmo imperante en las Fuerzas Armadas.

El cambio generacional que se operaba en el seno de las FAS, rompía con la tendencia de aquella impronta que identificaba a los militares que habían hecho la guerra al lado de Franco. Eso no quiere decir que se rompiera con la clonicidad que se generaba en las academias militares, ya que muchos jóvenes oficiales eran realmente dignas astillas de sus palos.

Más tarde, conocí la existencia de un grupo denominado UMD (Unión Militar Democrática) que se creaba en Barcelona. El conocimiento de esta organización, me reconcilió bastante con el estamento militar. No todo era ardor guerrero y el espantoso grito de ¡viva la muerte! y abajo la inteligencia.

Por casualidades de la vida, conocí al entonces comandante Guillermo Reinlein que era uno de “ellos” con el que tuve una buena relación, y a través de él, entablé relación con el también comandante Carlos Aguado. Desgraciadamente ninguno de los dos está hoy entre nosotros.

Más tarde, ya en el servicio militar, conocí a Rafael Tejero que fue mi capitán, persona entrañable, afectuosa y amigo de sus amigos que tuvo que encajar no pocas represalias por parte de sus superiores.

Mientras todo esto sucedía, ya habían “caído” un buen puñado de oficiales de la UMD que poblaban no pocas prisiones militares por toda la geografía española.
La Revolución de la claveles en Portugal había creado cierto desasosiego en el régimen y no estaba por la labor de que entre la oficialidad del ejército español pudiera cundir el ejemplo, aunque se partiera de realidades muy distintas.

A la creciente movilización de la izquierda y el movimiento obrero se le unía esta fisura que aunque pequeña no dejaba de ser un elemento más que contribuía a la creciente descomposición de aquel régimen, que aunque cada vez más débil y aislado mantenía intacto todo su aparato represivo.

Con la muerte del dictador parecía que todo podía solucionarse, que a todas las tímidas amnistías del inicio de la Transición llegaría la definitiva que pondrá en su sitio las cosas, que repararía agravios e injusticias. No fue así. Hemos tenido que soportar que los golpistas y liberticidas del 23-F han sido mejor tratados que los oficiales de la UMD, que militares conocidos por su desafección al nuevo régimen democrático eran ascendidos y promocionados.

Con treinta años de vigencia de la Constitución, la democracia sigue en deuda con los oficiales de la UMD y todos los gobiernos de la democracia han torpedeado cualquier iniciativa que fuera en la dirección de reparar esta injusticia histórica.

Todos los reconocimientos a la labor de la UMD han procedido siempre de la sociedad civil, a nivel particular, hasta que la Fundación Abogados de Atocha ha otorgado el premio por la defensa de las Libertades a la UMD, que ha sido entregado en un acto en Madrid en el auditorio de CC.OO Marcelino Camacho el 24 de enero, fecha en que se conmemora la matanza de los abogados laboralistas del despacho de la calle Atocha número 55.

Ha tenido que ser el movimiento obrero quien por medio de esta fundación, reconociera la aportación de los militares de la UMD a la consecución de las libertades y la democracia, que en estos tiempos de amnesia y olvidos más o menos voluntarios e inducidos, parece que quieren que creamos que este régimen de libertades fue una concesión graciosa gestada en algún despacho. A los nombres de los abogados asesinados por la extrema derecha aquel 24 de enero de 1977 (Javier Benavides, Enrique Valdelvira, Angel Rodríguez Leal, Serafín Holgado y Francisco Javier Sauquillo), se puede añadir una larga lista de nombres que padecieron detenciones, tortura o cárcel. El día anterior a la mantaza, murió asesinado por un miembro de la ultraderecha el estudiante Arturo Ruiz afiliado a CC.OO y horas más tarde la joven Mari Luz Nájera a consecuencia de un bote de humo lanzado por la policía en una manifestación en la que se reclamaba la amnistía. Todos estos actos violentos junto al secuestro del Teniente General Villaescusa y de Oriol y Urquijo, formaban parte de una estrategia de tensión que no pretendía otra cosa que torpedear y hacer inviable el camino hacia las libertades.

Queda bastante claro pues, que el paso de la dictadura a la democracia no fue un camino de rosas que se transitó así sin más, sin costes de vidas y carreras truncadas.

En el acto del día 24 de enero, los que allí asistimos, representábamos una buena parte del país real. El país oficial, no estaba y creo que nadie lo esperaba, aunque era la oportunidad idónea para romper con su autismo en lo referente a esta página de la historia de España que se ha cerrado en falso.

domingo, 11 de enero de 2009

ISRAELÍES Y PALESTINOS, UNA REALIDAD FRONTERIZA

¡Qué bonita foto!¡ eleeee.....!!!

Estos últimos días asistimos casi en directo a la masacre de la Franja de Gaza. Con más crudeza y cinismo del que es habitual en aquel eterno conflicto, vemos como se despliega paso a paso siguiendo el protocolo táctico militar la toma casa por casa de aquella zona geográfica maldita por todos los dioses.

Por tierra, mar y aire el ejército israelí castiga día tras día a una población víctima de sí misma y de sus líderes a los que parecen idolatrar.

Hamás, que está empeñada en la destrucción total y definitiva de Israel, tiene un profundo arraigo en la sociedad civil palestina post Arafat, aunque los actuales líderes no tienen ni por asomo la capacidad ni el carisma del viejo dirigente de la OLP.

Hamás, si así se puede decir, es un entramado fanático religioso antes que una organización política a la vanguardia del pueblo palestino que le apoya sin remedio, quizá porque es rehén de si mismo.

Estamos frente a una escalada de la violencia en aquella zona de consecuencias imprevisibles, en la que los que se llevan la peor parte, son los más débiles. Esta escalada pretende ser una “justa” respuesta defensiva al lanzamiento de cohetes por parte de Hamás contra el territorio israelí.

La cobarde y cínica actitud europea, que una vez más ha sido incapaz de hablar con una sola voz ante un conflicto, permite más libertad de movimientos a los dirigentes israelíes en el sangriento avance de sus carros de combate y en lo que será más tarde la toma casa por casa del poblado de Gaza, sin escatimar medios humanos ni materiales en la labor de limpiar de guerrilleros de hamas aquella zona.

Con la presidencia europea en manos de los euro escépticos checos, pocas iniciativas se puede esperar en favor de un alto el fuego, lo que dará cancha a que cada líder europeo arrime el ascua a su sardina e intente monopolizar con sus declaraciones (siempre ambiguas) minutos de aparición en las pantallas de televisión.

Si la actitud europea es mezquina, no lo es menos la de Obama, que se despacha diciendo que es el actual presidente Bush el que tiene que hablar y actuar, y que no es bueno, que es estos asuntos haya más de una voz. Sorprenden estas declaraciones cuando hace poco, y ante la catastrófica situación de la economía americana, el electo presidente Obama, no escatimó declaraciones ni recetas para tan grave situación.

Mucho ha tardado la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU pidiendo el cese inmediato del avance israelí en la Franja de Gaza. Lo que haga o diga este organismo poca o nula repercusión puede tener si no hay una clara y resuelta implicación de los países con derecho a veto.

Es posible que los israelíes hayan escogido estas fechas previas a la toma de posesión de Obama para añadir leña al fuego (previo despacho con los halcones de la actual administración), para escribirle las primeras páginas de la agenda al flamante presidente Obama y así condicionar sus primeras decisiones en política internacional, todo ello sin entrar en los temas electorales israelíes.

Quizá haya quienes piensen que los israelíes actúan ahora porque con Obama en el poder, les puede resultar más difícil debido a que no piensa mantener la misma actitud que sus predecesores frente al conflicto palestino-israelí. Personalmente me inclino por la primera hipótesis por una mera cuestión de relación causa-efecto y por el poco despreciable peso específico del lobby judío en Estados Unidos y el no menos importante complejo militar e industrial que aunque no goce de excesivas simpatías, está intacto y tiene su peso.

No me gustan los palestinos ni tampoco los israelitas. No me gusta ver a niños que deberían estar en la escuela, fotografiados junto a su padre con un arma en la mano y un cinturón de granadas. Se me dirá que no está en la escuela porque la han bombardeado los aviones israelíes, bien, aunque esto sea verdad no justifica lo primero. Tampoco me gusta que haya jóvenes que se inmolen cargados de bombas al grito de “Alá es grande”. Esto dice bien poco a favor de esa religión, y lo digo desde el respeto a las creencias.Tampoco me gusta que la mujer en la cultura árabe se le considere un ser de inferior categoría y esté supeditada totalmente al varón.

Los judíos israelitas tampoco me gustan. Aunque en aquella sociedad el laicismo es más posible que en la palestina, el peso de la religión en las decisiones políticas es importante, aunque sólo sea el relleno que da consistencia al entramando de poder y dominio que se persigue.

El empeño de los israelíes en humillar al pueblo palestino puede acabar a la larga pasándole factura en su propia casa, al igual que esa precipitación de las autoridades israelíes en poner en marcha esta operación militar que tiene un alto componente electoral. Posiblemente no valora el ejecutivo israelí que en estas operaciones en que los soldados se batirán cuerpo a cuerpo en un territorio hostil, puede ocasionar muchísimas más bajas que otro tipo de operación de castigo en la que la fuerza y la potencia de fuego, se ejerce a distancia.

La operación contra Gaza contenta a una parte de la opinión pública israelí y por consiguiente mejora las previsiones electorales de las encuestas, pero tendrán que calcular el desgaste que produce el retorno a casa de los soldados en bolsas de plástico. De los muertos palestinos, no hablo, (permítaseme este pequeño ejercicio de cinismo) pues al parecer sólo importan a unos pocos ciudadanos que han salido a manifestarse.

domingo, 4 de enero de 2009

NO PODEMOS SEGUIR ASÍ


Estos dos ciudadanos estan muy preocupados por la tibieza de Rodríguez Zapatero

Recientemente se ha conocido la noticia de que el Estado Vaticano ha denunciado los acuerdos del Pacto de Letrán, suscrito en 1929 con el Reino de Italia, gobernado en aquel tiempo por Benito Mussolini.

Este acuerdo convenía la aplicación en territorio vaticano de las leyes propias del estado italiano, las cuales no eran hasta ahora motivo de fricción o desacuerdo.

Parece ser que la reciente sentencia judicial en la que se autorizaba a retirar la alimentación a una enferma que llevaba bastantes años en coma ha destapado la caja de los truenos en el Estado de las mitras, los hisopos y el oscurantismo.

La noticia no ha gustado nada al gobierno del cavagliere Berlusconi, al que este acto unilateral y sin precedentes ha cogido por sorpresa.

Por boca del ministro del ramo, se ha comentado que esperan que el Vaticano recapacite y se replantee su decisión.

El Vaticano, ante la inminencia de la aplicación obligatoria de sus directivas sobre la homofóbia y los matrimonios entre personas del mismo sexo, ha decidido blindarse rompiendo con las leyes de un estado aconfesional que hasta ahora le eran útiles para el normal funcionamiento diario, aún teniendo ese estado, un trato más que amable y pacífico en la interpretación de los acuerdos entre ambos, que por otra parte son mucho menos “generosos” que los que mantiene actualmente con el Estado español.

Ya va siendo hora de que el gobierno de España denuncie el actual concordato con la Santa Sede y cumpla con lo que le obliga la Constitución que es el único marco legal al que debemos respeto y acatamiento.

No podemos estar siempre pendientes de la Conferencia Episcopal, este órgano de la Iglesia al que nadie ha elegido, no puede marcar la agenda de un país aconfesional como el nuestro y si intenta subvertir el orden democrático, hay que actuar en consecuencia con todo el peso de la ley.

Son demasiadas las ingerencias y actos de deslealtad por parte de los Rouco, Cañizares y compañía, sin dejar de lado los insultos y calumnias que se vierten y propagan desde las emisoras de radio propiedad de la Iglesia.

El gobierno de España debe acabar con esta situación con la ley en la mano, dándoles a esa gente donde más les duele, es decir en el bolsillo y las prebendas de las que vienen disfrutando desde tiempo inmemorial como la exención de impuestos.

No se puede confundir el deseo de contemporizar con la confesión religiosa con más arraigo en España con la claudicación o la debilidad, pues esas actitudes, acaban pasando factura.