Los guionistas de esta serie de TV3 se han lucido. La metedura de pata ha sido tal, que ha merecido un duro comunicado del Sindicat d´Infermeria de Catalunya (SATSE) que ha demostrado tener buenos reflejos al salir al paso del trato denigrante recibido por el colectivo de enfermería en uno de los capítulos del Cor de la Ciutat. Quién no ha tenido tan buenos reflejos, ha sido el muy ilustre colegio de Enfermería de Barcelona, que como siempre anda ocupado en otras cosas o subido a la parra de la más feliz de las inopias.
Los señores que escriben los guiones de esta serie, han intentado con más menos acierto reflejar la realidad social en los capítulos de la erie, pero cuando le ha tocado al ramo de las enfermeras, no han estado a la altura ni por asomo.
Se da por bueno el trato vejatório que reciben las enfermeras por parte de la usuarios y las presentan como seres minúsculos a las ordenes del médico sin ninguna preparación ni critério. Nada más alejado de la realidad. Estos emanuenses, no denen saber que este colectivo universitario, está altamente cualificado y que desempeña un papel irreemplazable en el sistema sanitario. Tampoco deben saber, que fuera de España, estos profesionales, gozan de un elevado prestigio, por su alto nivel de conocimientos y elevado grado de profesionalidad.
Señores del Cor de la Ciutat: ponganse las pilas, informense y rectifiquen
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