miércoles, 26 de agosto de 2009

UN POQUITO DE POR FAVOR

Virus de la gripe A (H1N1)



Desde que la nueva gripe ha dejado de ser una cosa que pasaba en el extranjero y se ha convertido en algo real que empieza a cobrarse vidas en nuestro país, se han vertido todo tipo de consignas y declaraciones que en nada contribuyen a informar de lo que está pasando y no hacen más que fomentar un alarmismo que, una vez instalado en la sociedad, es muy difícil de combatir.
A mi entender la ministra de sanidad, Trinidad Jiménez, está informando adecuadamente al conjunto de la sociedad, midiendo las palabras, matizando y explicando en cada momento lo que viene al caso.
Lo malo de todo esto es que resulta demasiado tentador hacer uso y abuso de este fenómeno pandémico con fines políticos. No ha faltado quienes descalifiquen la labor del ministerio de sanidad, con argumentos muy pobres e infundados; tampoco veo acertado que desde las comunidades autónomas se aborde en clave cantonal las medidas de todo tipo que potencialmente sea preciso adoptar.
El mensaje que se da a la población debe ser único, el mismo y sin retoques tanto si lo da la señora ministra como si se trata de un consejero de sanidad de cualquier comunidad autónoma. Sería difícil de comprender que existieran diferentes criterios en cada comunidad a la hora de tomar cualesquiera medidas necesarias para evitar contagios o transmitir consejos preventivos a la población.
Me parece realmente penoso que al barajarse la posibilidad de retrasar el inicio del curso escolar todo el mundo se sienta autorizado a opinar y desautorizar de entrada cualquier idea que pueda evitar un número elevado de contagios en un espacio de tiempo corto, lo cual contribuiría a colapsar los servicios sanitarios.
En situaciones excepcionales las autoridades no pueden estar al albur de qué dirán tales o cuales colectivos o asociaciones de padres de alumnos. Las decisiones que pueden afectar a la salud de todos no pueden ser tomadas en asamblea ni en un plató de televisión ni mucho menos intentar contentar a todos, las medidas son las que son y no pueden estar sujetas a ningún debate que no sea científico.