jueves, 21 de junio de 2012

EUROVEGAS MON AMOUR O ARTUR MAS TE QUIERO




En la situación económica actual en que hay tanta gente desempleada y que lo pasa muy mal, hay una casta dirigente que aprovecha para intentar colarnos unos cuantos goles. Sirva la metáfora futbolística para esbozar una situación de claro abuso en la que se juega con la necesidad y las esperanzas de no pocos.

Quiero referirme al escribir esto al proyecto Euro-Vegas que se nos pinta como una gallina de huevos de oro que sin duda nos quitará el hambre de encima y nos devolverá a la senda del bienestar celestial.

Tanto Madrid como Barcelona pugnan por delante y por detrás para hacerse con este proyecto, envían mensajitos al magnate americano –de cuyo nombre no me acuerdo y tampoco quiero acordarme-- promotor de este invento y le juran amor eterno y cambios legislativos a porrillo: “De la desregulación al cielo” dice Esperanza Aguirre y en Catalunya el gobierno de la derecha catalana  que gobierna para los catalanes de pata negra, prepara una ley de las de verdad como las que solo ellos saben hacer, que va a encantar al amigo americano no pudiendo negarse a decantarse por Barcelona para construir ese parque temático del juego y el jolgorio continuo.

¿Qué diferencia a Esperanza Aguirre y sus boys de Artur Mas y sus amiguetes? Poquita cosa, ambos grupos persiguen lo mismo y no reparan en medios y estratagemas para conseguirlo, mintiendo lo que haga falta y engañando lo que convenga sin el más mínimo atisbo de sonrojo. Cuando convenga ambos agitarán sus respectivas banderitas y avivarán el fuego del enfrentamiento, lanzándose las culpas que convengan para no asumir sus propios errores.

No se puede engañar a tantos durante tanto tiempo sin que salga contestación al discurso truculento de esa gentuza, no se puede vender un proyecto de parque temático de la ludopatía, el putiferio y la mafia como el maná que nos quitará el hambre y la roña de encima. Si alguien quiere ser engañado, adelante, que lo crea y espere sentado.

Me disgusta profundamente que ver a nuestros representantes rindiendo pleitesía a ese magnate americano que según dicen es un pájaro de mucho cuidado, vinculado con la mafia y el sobornos a partidos políticos en forma de pago de costes de campañas (ojo al dato), pero cuando lo pienso y razono un poco llego a la conclusión de que este entendimiento es normal: nuestros representantes políticos y ese magnate son la misma mierda.