martes, 31 de mayo de 2011

LA SANIDAD RESPONDE... LOS USUARIOS TAMBIÉN


Esta mañana en el hall del Hospital Germans Trias había una mesa en la que se pedían firmas contra los recortes que se anunciaron y han llegado subrepticiamente, inopinadamente, con nocturnidad, poquito a poco pero con todo el rigor y precisión de un despliegue militar.

La Junta de Personal estaba representada por un variado elevado número de sus integrantes que iban explicando a los trabajadores y a los usuarios los motivos de la recogida de firmas.

A diferencia de otras ocasiones el personal está movilizado y consciente de lo que se juega y los usuarios están cada día más pendientes de lo que ellos pueden perder o están perdiendo ya. Al fin y al cabo usuarios lo somos todos en cualquier momento de nuestras vidas.

Los pliegos iban dirigidos al Govern de la Generalitat y al Gobierno de España. Más allá del contenido de los pliegos y a quines se dirigían, lo más importante a mi juicio es la sintonía que se percibe entre los usuarios y los trabajadores del hospital, conscientes de que están en la misma trinchera y que defienden lo mismo.

Me ha llamado mucho la atención un personaje (un jubilado) que estaba colaborando con los sindicalistas en la recogida de firmas. He procurado entablar conversación con él y no ha sido nada difícil. Era un personaje curtido por mil luchas, avejentado por el maltrato que da la vida y lustroso por haber conseguido quitarse el hambre de encima, ese hambre histórico que se lee en muchas caras y espaldas que parecen estar siempre cargadas.

El hombre (compañero) era amable y dicharachero, llevaba una insignia de CC.OO en el bolsillo de la camisa. No podía ser de otra manera. Solo he visto en gentes de su edad y procedencia ideológica ese optimismo histórico solidamente trenzado a lo largo de años de sufrimientos y largas luchas. Estos añosos hombres y mujeres se identifican y apoyan a los “chavales” de las plazas españolas. No podía ser de otra manera. ……Cada época es distinta y toca luchar de forma diferente….decía este compañero que inició su vida laboral a los nueve años.

No sé como ni de qué manera va a acabar esta ofensiva neoliberal que lleva a cabo un gobierno “dels nostres”, un gobierno nacionalista con mucha caspa que no para de hacerle guiños al PP, lo que sí me atrevería a asegurar es que no acabará muy al gusto de ellos, no lo tendrán fácil y se equivocan si se empecinan en hacer una lectura parcial del resultado electoral. El avance de la derecha no es un respaldo a sus políticas, es más bien un castigo a las malas políticas de la izquierda que ha sido la que ha lanzado la primera piedra contra el Estado del bienestar, con sus claudicaciones, renuncias y políticas erráticas.

No se lo estamos poniendo fácil y no veo intenciones de claudicar por parte de los trabajadores ni los usuarios ante los recortes de personal, cierre de plantas de hospitalización y quirófanos.
No quiero acabar sin dedicar unas palabras a los señores que formaron parte del anterior Govern: Se puede gobernar mal, se puede gobernar peor y se puede gobernar como lo hicieron ustedes: rematadamente mal, jodidamente mal y consecuencia de ello es lo que tenemos ahora. La peor casta política que pudiera gobernarnos, casi peor que ustedes y vienen con hambre atrasada y dispuestos a quedarse mucho tiempo.