LABILIDAD

Juan Marsé escupe en el escote de Mª de la Pau Janer

He conocido la noticia de que la escritora Mª de la Pau Janer, se va presentar a las elecciones autonómicas de la Comunidad Balear en las listas del PP. No creo que mereciera emplear mucho tiempo hablando de esta escritora, que nunca me ha interesado, si no fuera porque en las últimas elecciones al Parlament de Catalunya, apoyara públicamente al candidato nacionalista Artur Mas.

Mª de la Pau Janer ha conducido programas de radio y televisión, es miembro de la Asociación de Escritores en Lengua Catalana y recibió el Premio Planeta no sin el comentario de Juan Marsé miembro del jurado, que calificó su novela como la menos mala de las que se habían presentado. Polémicas a parte, no creo que haga falta decir que cualquier persona puede presentarse en las listas que más le gusten o disgusten. Lo que me parece difícil de digerir es la facilidad con que ciertos personajillos cambian de pluma y dónde dijeron digo dicen Diego.

He creído siempre, que salvo algunas diferencias de matiz entre unos y otros, la derecha siempre es la derecha y se comporta como tal. Defender esto me ha costado no pocas discusiones y enfados con gente de enraizada ideología nacionalista, que juran por los clavos de cristo que no son de derechas, sino nacionalistas y que una cosa nada tiene que ver con la otra.
La verdad es que con el capote del nacionalismo, esconden la verdadera esencia de su carácter conservador. El matiz que separa a unos y a otros es muy lábil, de escaso espesor y muchas veces se hace imperceptible.

Es cierto que hay unas diferencias remarcables entre el PP y CiU, mejor dicho entre el PP y Convergencia Democrática, ya que el ideario de Unió Democrática se aleja unos cuantos palmos del de sus socios, en el sentido de que es más conservador en temas como el aborto, el divorcio, los matrimonios gay etc. Unió, dicho a la pata la llana, huele más a sacristía.

Mallorca es el paradigma de la especulación, del caciquismo y de los negocios sospechosos. Sólo hay que consultar las hemerotecas para marearse con la cantidad de escándalos urbanísticos, pucherazos electorales y un largo etcétera de asuntos turbios. Mientras estos intelectualillos de medio pelo que se emocionan oyendo cantar a Mª del Mar Bonet la Balanguera y unas cuentas memeces más, lamentándose de “com han malmés es paisatje de les Pitiuses”, son capaces de abrazar una opción como la que representa el PP, principal responsable del desastre urbanístico y medioambiental de aquellas islas.
Estoy convencido de que el españolista Juan Marsé, no haría una cosa semejante a la que ha hecho esta empalagosa escritora.