ME DUELE LA MINISTRA

Usuario de Cercanías haciendo tiempo y pensando en Mª Magdalena Ávarez

Doña magdalena Álvarez Ministra de Transportes, tiene la habilidad de ponerme de mala leche. Ya lo consiguió con el asunto de Air Madrid –todavía tengo secuelas de aquel soponcio-. Ahora le toca al Aeropuerto del Prat.
Se está hablando desde hace tiempo de la conveniencia de que este aeropuerto pase a ser gestionado por un consorcio formado por administraciones varias y por supuesto el Estado y la Generalitat de Catalunya.
No soy experto en estos temas pero creo que tengo algo de sentido común –todavía- y cuando alguien se empecina con excusas peregrinas en negar algo, me veo en la obligación de desconfiar.
Parece ser que en Europa, los aeropuertos importantes, están gestionados de esta forma, es decir, descentralizadamente. Esto no sé a quién gusta menos, si a la Sra. Ministra o al presidente de AENA.
Hoy he oído a la inefable Ministra decir que nuestros aeropuertos son la envidia del mundo entero por lo bien que funcionan. Sostiene la Ministra que el funcionamiento en red es una maravilla. Vea el lector que los argumentos de la Ministra son de peso, y destacaría dos palabras clave: red y maravilla.

Otro comentario de la susodicha alta funcionaria referente al traspaso de los trenes de cercanías a la Generalitat: Está de acuerdo, sin embargo hay que negociar algunos temas. ¡Como no! Ha dicho que hay que dejar espacio para la circulación de los trenes de alto recorrido. ¡Bien! Y que la Generalitat se haga cargo del importante déficit de infraestructuras que viene padeciendo este servicio en Cataluña.
Hemos escuchado por boca del Conseller Nadal, que este necesario traspaso, debe hacerse con todas las instalaciones puestas al día, recuperando los déficits de inversión en este servicio público acumulados desde hace mucho tiempo (dos legislaturas).

No sé que pensar. Este país se las trae. No comprendo como desde la presidencia del Gobierno se dice que se buscará una solución satisfactoria para la gestión del Aeropuerto del Prat y después la Ministra da una coz en la cruz de los pantalones del President Montilla y por extensión a todos los ciudadanos de Cataluña, que una vez más, nos sentimos estafados y burlados por el gobierno.
Si la declaración de Doña María Magdalena es a título personal, desmarcándose de la postura oficial, el presidente del Gobierno debería cesarla y si es un paripé jacobino en clave electoral –que no creo- es del todo innecesario, está fuera de lugar y pone de manifiesto el verdadero talante del Gobierno de España hacia Cataluña y sus instituciones.
Estas actuaciones, no hacen más que reforzar las posiciones más radicales del nacionalismo y dan armas y argumentos a este para desgastar al gobierno catalán, reforzando el argumento tan manido de que su acción política esta subordinada a los intereses del gobierno del PSOE.